Fotografia de la Pieza  

Tablilla

de Fara

 

 

Mesopotamia.

Antigua Shuruppack.

Hacia el 2600 a.C.

Museo del Louvre. París.

 

Alto: 8, ancho: 7

 

Mármol

75 €


La escritura había nacido en Sumer y en Elam por la necesidad de anotar las riquezas de las ciudades que se organizaron durante el IV milenio. Lentamente, durante los siglos siguientes, los escribas, más dibujantes que escritores, mejoraron este invento. Hacia el 2600, la escritura estaba suficientemente desarrollada para permitir una redacción, propiamente dicha, lo cual dio impulso a la primera burocracia conocida.

En Shuruppack, ciudad muy antigua de antes del diluvio, cuna del Neo-sumerio, una escuela de escribas redactó sus documentos de una forma aún rudimentaria, más bien como memorias de las operaciones contables. Tenemos aquí el acta de venta de un esclavo masculino y de una casa de esta ciudad. El escriba ha anotado cuidadosamente la superficie, que equivale a 54 mts², y ha enumerado los seis testigos jóvenes, garantes de la venta. La palabra testigo es un buen ejemplo de la lengua y de la escritura de los sumerios de esta época. Se escribe con tres signos:

1) LU, hombre: del cual podemos ver la silueta.

2) KI, tierra: representada como una parcela romboide.

3) INIM, palabra: esta noción abstracta ha sido expresada por la imagen de la cabeza de formas geométricas, con su barba que atrae la atención sobre la boca y sobre las palabras que salen de ella.

Los signos pictográficos comienzan a ser esquemáticos, tomando cada línea el aspecto de un clavo: la escritura se tornará pronto cuneiforme.

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