El desarrollo del hinduismo de la época Gupta se acentuó en el
período siguiente, conocido como la Edad Media de la India.A este
período perteneció el arte Pala, cuya producción artística estuvo
dedicada completamente a temas hinduistas.
Al principio las formas no diferían mucho de las adoptadas por el
arte Búdico, por lo que a menudo es difícil atribuir a una de las dos
corrientes las obras que carecen de la representación de detalles
específicos. No obstante, a medida que el hinduismo fue imponiéndose,
impulsó el nacimiento de una nueva iconografía y de un estilo que
expresaba los dogmas de la religión hindú, muy diferente de la
budista.
En un principio este estilo mostraba en sus figuras una gorda y
blanda carnosidad. Las estelas, bastante sencillas, estaban redondeadas
en el extemo superior y las figuras eran pesadas, pero de actitud
natural y de aspecto benigno. En el siglo X, vestiduras, ornato y
fondo se hacen más majestuosos, los cuerpos delgados aunque vigorosos,
y los rostros se alargan cargándose de intensa vida.
En fin, las estatuas Pala son admirables por la elegancia de las
siluetas, el encanto de los rostros y la delicadeza de los
ropajes. Al lado de unas admirables imágenes de Buda existe una
rica iconografía brahmánica. Los bronces Pala figuran entre los más
bellos de la India, al tiempo que ejercieron una considerable influencia
en el arte de Nepal y en el arte birmano.
Un movimiento de religiosidad popular suscitado por las predicaciones
en lengua tamil de los santos Nayanar y Alvar, despertó una devoción
apasionada, ora por Siva ora por Visnú. A pesar de los frecuentes
conflictos que surgían entre los fieles de una y otra divinidad, los
unía una común actitud religiosa fundamental. Unos y otros creían que
Dios es grande, glorioso y benéfico, que sus obras son maravillosas y
que su esencia es el amor. Incluso cuando Dios se manifiesta como
Siva, el «Destructor», es tan infinitamente digno de veneración que
sus criaturas no pueden dejar de entonar himnos en su glorificación,
pues Él sólo destruye lo inservible.
La
escultura Pala está tallada en la pizarra negro-azulada de la montaña
Rajamahal, que es la única cantera del Ganges. Esta cabeza de
Siva presenta abultados mofletes, formas redondeadas, ojos entrecerrados
y un peinado que nos hace recordar el estilo Gupta y, por tanto, que fue
realizada en los primeros años del arte Pala. |