Todos los pueblos indoeuropeos adoraron una deidad, con frecuencia
simbolizada por la Luna, que encarnaba no solamente la idea de la
fertilidad femenina sino también la Fertilidad Cósmica o Universal.
Fue conocida por Astarté entre los fenicios, Asragath entre los sirios,
Isthar entre los asirios... Fue venerada posteriormente por los
italiotas bajo los nombres de Flora, Venus, y Juno en cuanto preside las
funciones de la maternidad. Homero la llama hija de Júpiter y de Dione,
pero ya antes aparece como nacida de la espuma del mar (Afrogenia), como
salida del seno de las olas (Anadiómene), y según la tradición
primitiva de los fenicios, llegada a aquel país navegando dentro de una
concha. En el fondo de las fábulas se descubren ideas y nociones
cosmológicas sobre los elementos primordiales del mundo, y Afrodita
representa el Principio Húmedo, causa de toda generación y fecundidad
en la Naturaleza.
Afrodita es también la diosa del Amor. Platón habla de la
existencia de dos Afroditas distintas: la nacida de Urano (el Cielo), Afrodita
Urania, diosa del amor puro, y la hija de Dione, la Afrodita
Pandemo (es decir, la Afrodita popular), diosa del amor vulgar. De
los amores de Ares y Afrodita nacieron Eros y Anteros, Deimo y Fobo (el
Terror y el Temor), Harmonía, y Príapo, el dios de Lámpsaco,
protector de los jardines (pues en ciertas tradiciones Afrodita es
considerada la diosa de los jardines, si bien esto sea en rigor
aplicable a su encarnación italiana, Venus). La mitología cuenta que
cuando Mirra, convertida en árbol, hubo dado a luz a Adonis, Afrodita
recogió al niño que era bellísimo y le confió a Perséfone. Los
animales favoritos de la diosa eran las palomas; un tiro de estas aves
arrastraba su carro. Sus plantas eran la rosa y el mirto.
La estatua de Afrodita que aquí contemplamos es una réplica antigua
de un original griego del siglo I a.C., respondiendo por completo al
canon de belleza ideal clásico, en el que la desnudez carece de toda
morbosidad. En este caso el autor tomó como modelo a una mujer joven,
aunque hay Afroditas representadas como una mujer madura, tal es el caso
de la estatuilla marmórea denominada Afrodita en el baño (Museo
de Rodas), de Dedalsa, donde vemos los pliegues en el cuerpo de Afrodita
agachándose; a pesar de esta diferencia existe una semejanza de estilo
entre ambas obras. |