Fotografia de la Pieza  

Virgen con

niño (escultura)

 

 

 

Siglo XIII. Chêne. Norte de Francia.

Original en madera.

Museo Vivenel Compiègne. Francia.

 

Alto: 45, ancho: 18, prof.: 16

 

Resina-Madera

(escultura)

750 €

 

La imagen característica de la Virgen con el Niño -la Maiestas Mariae- del estilo románico refleja a la Virgen sentada en su trono, hierática y ausente, elevando en su regazo al Niño Jesús, cuya anatomía y rasgos más bien parecen ser los de un hombre que los de un niño; Jesús bendice con la mano derecha, y sostiene un rollo, un pergamino, o la bola del mundo con la izquierda.

Parte de esos rasgos se advierten aún en esta obra, realizada en madera, uno de los materiales más importantes en la construcción y decoración medievales. Sin embargo, pertenece ya a los comienzos del período gótico.

En la escultura gótica se reacciona contra los amanerados, abundantes y retorcidos plegados del estilo románico de última hora, y los ropajes se tornan sencillos, de escasos pliegues angulosos y de composición clara y grandiosa. El paso del románico al gótico reflejó una nueva forma de concebir el mundo, una nueva manera de entender la realidad, y una forma distinta de concebir las relaciones de lo humano con lo divino.

En esta obra, muy parecida a otra de la misma época que se encuentra en la Catedral de Astorga (León), vemos cómo la Virgen inclina su cabeza queriendo mirar al Niño, y dejando entrever algún sentimiento, sin la rigidez propia del románico.

© Taller HORUS